JACC: Un biomarcador del nivel de azúcar en sangre identifica pacientes con aterosclerosis y riesgo cardiovascular

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31 Mayo 2021
Investigación
Publicaciones
  • Asociación entre los niveles de hemoglobina glicosiliada y severidad de la enfermedad cardiovascular

Este hallazgo del grupo del CNIC publicado en JACC permite clasificar mejor el riesgo cardiovascular de los pacientes no diabéticos

El uso rutinario de la hemoglobina glicosilada (un biomarcador indicativo del nivel de azúcar en sangre) en personas no diabéticas ayuda a identificar aquellos pacientes con mayor enfermedad aterosclerótica. Este biomarcador, utilizado para el diagnóstico y el seguimiento de pacientes diabéticos, puede ser de gran utilidad para estimar la enfermedad aterosclerótica, y por tanto el riesgo cardiovascular, en pacientes con o sin una posible prediabetes, según un estudio llevado a cabo por Investigadores del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC).

La novedad que propone el equipo del CNIC radica en utilizar el marcador que mide el nivel glicémico en sangre en personas de mediana edad, aparentemente sanos, y que no tienen diabetes mellitus, pero con o sin una posible prediabetes.

El valor añadido de este biomarcador es que, cuando se utiliza para valorar el riesgo cardiovascular junto con los factores de riesgo tradicionales (hipertensión, dislipemia, tabaquismo), mejora la clasificación entre aquellos sujetos con mayor y menor riesgo de enfermedad aterosclerótica.

Además, afirma el estudio que se publica en The Journal of American College of Cardiology (JACC), debido a que estilo de vida saludable reduce los niveles de hemoglobina glicosilada, debería considerarse como la primera opción para reducir el riesgo cardiovascular.

La hemoglobina glicosilada es un test diagnóstico económico, disponible y utilizado ampliamente en la práctica clínica habitual, explica el Dr. Xavier Rosselló, investigador del CNIC y cardiólogo del Hospital Universitario Son Espases de Palma de Mallorca. Por tanto, su uso para ayudar a calcular el grado de aterosclerosis subclínica podría tener una implantación inmediata.

Según el Dr. Valentín Fuster, director General del CNIC, esta nueva información “contribuirá a personalizar más el riesgo cardiovascular sin prácticamente ningún coste adicional, lo que se podría traducir en planes de seguimiento más personalizados, enfocados primariamente en cambios en el estilo de vida, y eventualmente quizás en el uso de fármacos antidiabéticos”.

El estudio forma parte del proyecto colaborativo PESA-CNIC-SANTANDER, cuyo investigador principal es el Dr. Fuster. El PESA-CNIC-SANTANDER, que se inició en 2010 y se ha renovado hasta 2030, es uno de los estudios de prevención cardiovascular más importantes del mundo.

La enfermedad aterosclerótica se detecta habitualmente en estadios avanzados, cuando ya ha causado daño, como un infarto de miocardio, un accidente cerebrovascular u otros eventos cardiovasculares. El pronóstico de las personas cambia radicalmente si han presentado alguno de estos eventos clínicos, por lo que la detección precoz de la patología que produce dichos eventos (aterosclerosis) es vital para mejorar la cantidad y calidad de años de vida de la población.

El hallazgo del grupo del CNIC permite clasificar mejor el riesgo cardiovascular de los pacientes no diabéticos o con o sin una posible prediabetes.

En este sentido, apunta el Dr. Rosselló, “el uso de la hemoglobina glicosilada resultó particularmente relevante en aquellos participantes con bajo riesgo, mientras que su asociación con la enfermedad aterosclerótica en los individuos que ya tenían un riesgo moderado, por la presencia de otros factores de riesgo cardiovascular, fue menos evidente”.

Los autores concluyen que “este hecho, convierte a la hemoglobina glicosilada en un biomarcador de masas, ya que su principal aplicación se ubica en el estrato de sujetos de menor riesgo, donde se concentra la inmensa mayoría de la población general, y donde, en términos absolutos, se producen el mayor número de muertes cardiovasculares”.

El trabajo es fruto del esfuerzo de un equipo multidisciplinar que incluye médicos, biólogos, estadísticos, bioinformáticos, enfermería y otros muchos profesionales que, junto con la colaboración de los participantes del Banco Santander, hacen posible el estudio PESA.

El estudio ha recibido fondos del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII, PI15/ 02019, PI17/00590, PI20/00819) y el European Regional Development Fund (ERDF) “A way to make Europe” y ha contado con investigadores del CIBER de Enfermedades CardioVasculares (CiberCV).

  •  Glycated hemoglobin and subclinical atherosclerosis in people without diabetes.  Xavier Rossello, Sergio Raposeiras-Roubín, Belen Oliva, Fatima sanchez-cabo, José Manuel García-Ruiz, Francisca Caimari, Jose M Mendiguren, Enrique Lara Pezzi, Hector Bueno, Leticia Fernandez-Friera, Antonio Fernández-Ortiz, Javier Sanz, Borja Ibañez, and Valentin Fuster. 10.1016/j.jacc.2021.03.335